Vino de color amarillo con destellos verdosos. En nariz se presenta floral y frutado, con presencia de flor de azar, duraznos blancos y ciertas notas cítricas. Leves dejos de tabaco y vainilla se hacen presente en la copa al cabo de unos minutos. En boca se presenta fresco, equilibrado. La acidez siempre presente lo convierte en un vino persistente, de buen volumen, ideal para los mejores maridajes gastronómicos.

Composición: 80% Semillon; 20% Chardonnay

Crianza: 6 meses en tanques.

Bodega: Finca Las Glicinas.

Origen: Paraje Altamira, Mendoza.